Bestia de Sangre -Libre-

¿Cuantos dias habia pasado en este profundo letargo? Abrumado por el pasado de mi vida, cansado de buscar fantasmas y de encontrar viejas leyendas, asqueado de la sociedad...del bullicio, la tecnologia...me vi obligado a tomar un largo sueño bajo tierra. Por supuesto me las habia ingeniado para "ocupar" una tumba ajena, haciendo cenizas del antiguo cadaver que residia ahora bajo mi espalda.

Era consciente de todo y nada a la vez, podia escuchar a los humanos con sus atareadas vidas, podia reconocer en que año estaba...cada acontecimiento que sucedia.
Era hora de volver de "entre los muertos", de revivir de nuevo el recuerdo de Armand.

Abri de un fuerte golpe la tapa del ataud y emergi de el, cubierto de una fina capa de polvo...ajado por la sequedad del lugar.
Me incorpore y mis sentidos me alentaron, escuchaba el fluir de la sangre a kilometros...el olor de la misma atrayendome como si yo me tratara de un niño siguiendo al flautista de hamelin.
Y asi lo hice, busque a lo que seria mi primera presa, un ladron de tumbas.

Me acerque sigiloso, como solo un vampiro podria acechar a su presa...no tenia ni tiempo ni ganas de elaborarme una historia para cazar a mi victima..iria directo al grano.
Me avalance sobre el como una fiera, desgarrando su yugular con mis colmillos... alguien me hubiera dicho que tratara a la comida con cariño...alguien...

La sangre parecio devolverme la cordura, no derrame gota alguna...me sentia otra vez "vivo".
Me gire sobre mis pasos percibiendo a lo lejos una esencia vampirica...seria mi comite de bienvenida? La esencia era de alguien vagamente cercano... ¿Me habria olido? No relentize mas el encuentro, fui hacia dicha presencia abiertamente.
Una vampira de cabellos oscuros...rostro blanquecino y hermoso..no podia ser mas que ella...Pandora.

-Cuanto tiempo Pandora...- comente en un par de susurros a medida que me acercaba a la mujer.

La amable y gentil Pandora... uno siempre agradecia ver un rostro conocido tras el largo letargo.

-Mucho tiempo Pandora...tampoco lo conte- sonrei brevemente y me acerque mas a ella, tomando su mano para besarla como hacian los caballeros de antaño -Muchas gracias, lo cierto es que ando un poco desorientado y me gustaria poner en claro mis ideas....- acepte su oferta gustoso acomodandome sutilmente el cabello -No te preocupes por mi capital...lo deje todo "bien atado" antes de echarme la siestecita- declare con cierta ironia -pero cuentame, resumeme la situacion Pandora...aunque ya he oido muchas cosas- comente con suavidad situando mis manos tras mi espalda.

Cuando la mujer menciono el primer nombre, algo en mi interior se removio, quizas fuera pena, tristeza o resentimiento...mi rostro seguia manteniendose sereno, quieto cual estatua de marmol.

Escuche las palabras de Pandora, sopesando cada una de ellas...una vez mas parecian surgir conflictos pese a la epoca aparente de paz. Desearia no ver mas guerras, pues mis ojos ya habian visto demasiadas desgracias, pero algo en mi interior se alarmo...

-Vaya..que interesante...habra que ir con cuidado entonces- respondi con una media sonrisa comenzando a caminar junto a ella. Recorde que habia mencionado a Lestat...asi que el principe malcriado seguia con sus andanzas -Has visto a Lestat?- pregunte casi en un susurro fijando mis ojos en cada rincon de aquel paisaje.

Solte un breve suspiro, siempre era bueno saber que aquellos que habian tenido relacion contigo se encontraban "vivos", era un consuelo para mi alma inmortal.

Estaba algo metido en mis pensamientos, mi mente viajaba a otra parte, recordando quizas ciertos aspectos de mi pasado, hasta que la voz de Pandora me llego, limpia y clara, devolviendome a la realidad.

-uhm?- la mire algo desorientado -ah si...- sonrei brevemente -que crees que me pudiera quedar bien?- respondi con otra pregunta adentrandome en aquel lugar -no se...algo elegante, no demasiado presuntuoso.- comente mientras miraba un pantalon de tela oscura, pensaba hacer algunas visitas y debia vestirme para la ocasion.

Sonrei gentil ante el halago de Pandora, como tan solo un "angel" podria hacerlo. Me quede observandola mientras recogia varias ropas entre ellos un cinturon, dos o tres camsias, una chaqueta, pantalones, todo fue dejado sobre mis manos. Si hubiera sido humano habria perdido el equilibrio ante el aluvion de ropa.

Solte una pequeña carcajada y camine hasta el probador -Confio enteramente en tu criterio Pandora...asi que me probare todo esto...tu seras mi juez y verdugo- comente tras echarle un rapido vistazo.

Me puse una de aquellas camisas, una negra...el pantalon de vestir con aquel cinturon y aquella chaqueta. Era todo de mi talla, tenia que elogiar el ojo de Pandora.
-Y bien?- comente suavemente al tiempo que soltaba un suspiro -que tal me veo? en realidad...no es tan importante el aspecto no?- comente con una pequeña sonrisa.

-A estas alturas de la vida Pandora casi logras sacarme el color de las mejillas- sonrei candidamente cuando la vampiro tomo mi rostro entre mis manos. La diferencia de altura era bastante, en verdad pareciamos madre e hijo...nada mas lejos de la verdad.

Asenti suavemente escuchando las demas palabras con imperturbable tranquilidad y negue a lo ultimo -no deseo abusar de tu amabilidad, tan solo...tienes algun movil por ahi? He de comprobar el estado de mis cuentas...hay mucho listo suelto- declare mostrando una pequeña sonrisa ladina, mientras tocaba una de las otras camisetas de suave tacto.

Le respondi con una pequeña sonrisa mientras tomaba aquel aparato. Cuanta lata me dio la tecnologia en su momento... y que buenos "momentos" me habia brindad. Si la memoria de vampiro no me fallaba tenia que llamar a cierto numero. Me aleje unos pasos de Pandora, fue algo instantaneo pues ella podia oir lo que quisiera si lo deseaba.

Efectivamente llame al numero indicado, tras pedirme identificacion y una clave la cual unicamente sabia yo y esa persona me anuncio que en unos dias tendria una "tarjeta universal" para todos mis gastos. Colge el aparato y se lo devolvi a Pandora -Gracias...ya esta todo listo- comente con suavidad -y bien...me llevare esto puesto...y aquellas camisas..no hace falta que me las pruebe, de seguro me quedan bien- anuncie con una pizca de ego mientras recogia la ropa.
Tome la mano de Pandora y nos dirigimos al mostrador.

Durante un instante la mira sin comprender mas no dije nada, con una mano atuse mis cabellos y una vez fuera de la sartreria contemple la luna llena que habia en el oscuro cielo.

Dirigi mi mirada a Pandora, mas bien contemplado aquel perfil romano y una imperceptible sonrisa se formo en mis labios -me acompañarias...a dar un paseo? Me gustaria ver que tanto a avanzado la tecnologia mientras estuve dormido...no me gustaria llevarme una desagradable sorpesa- comente con suavidad y serenidad.

-A uno siempre le sorprenden los cambios...- sonrei brevemente al escuchar sus palabras -Vayamos entonces- comente con un susurro caminando al lado de la mujer con las manos tras la espalda.

Detuve mis pasos y mire a Pandora fijamente a los ojos -sabes algo mas de los demas...vampiros?- pregunte algo contrariado, desde que la vi le quise preguntar por mi maestro aunque realice de forma general la pregunta disimulando mis ansias, quizas ella lo habia visto, quizas no...

Desde que convirtio aquellos dos humanos, mis pequeños amores Sybelle y Benji, desde que me enfade tanto con el hasta el punto de querer afixiarlo entre mis manos por darle aquel don inmortal a mis pequeños, no lo habia visto...ahora, estaba solo de nuevo y quizas tuve cierta esperanza...esperanza para que? Ni yo lo sabia.

Sus ojos mostraron un atisbo de tristeza-Ya te lo habia dicho.. solo he visto a Lestat de los otros no he sabido nada-respondi muy a mi pesar- llevo años deambulando por la tierra sin dormir..ni so;ar mas que volver a ver a los que amo... pero he fallado estrepitosamente-confese imperturbable-la casualidad me llevo a Lestat y ella misma me ha mantenido lejos de los demas.


perdon por la demora

No me hizo falta poner atencion a sus palabras, bastaba con observar la tristeza implicita en sus ojos. Supuse que andaba buscando a Marius, a quien si no? A diferencia de ella yo no lo buscaba, habia dejado de hacerlo mucho tiempo atras, me habia resignado, pero aun asi tenia que preguntar...como el mocoso que fui cuando era humano.

-No has fallado Pandora...encontraste a Lestat...y ahora me has encontrado a ti...quien dice que mañana o dentro de dos años no lo encontraras a el?- evidencie sin demasiada sutileza, caminando dos pasos por delante de ella para ocultar mi confuso semblante.

Me perdi durante unos instantes, recordando aquellos dias que todos pasamos en la Isla de la noche, en aquella pequeña porcion de tierra que habia adquirido y edificado para nuestro disfrute.
Pero como todo sueño se acabo, los vampiros seres solitarios por naturaleza, incapaces de permanecer mucho tiempo al lado de otro vampiro al que se acaba repudiando o abandonando por tedio...
Todos reclamando soledad y yo afanado en repudiarla...y cuantas veces me maldecia por ello.

-Vivir con normalidad?- sus palabras me trajeron de "vuelta" y me gire para observar mejor su hermosa faz romana -Los vampiros no somos nada normales...pero hoy en dia, quien sabe...- me encogi ligeramente de hombros y continue caminando -Donde te hospedas Pandora?- pregunte por mera curiosidad.