-*- Yuda -*-

Fue un poderoso ángel fiel al servicio de Dios, excelente guerrero, valiente como nadie, un ser simplemente hermoso y perfecto…
Siglos atrás, antes de ser nombrado general de unos de los escuadrones
Mas fuertes del cielo, fue aprendiz junto con una hermosa joven de larga cabellera oscura y rostro delicado; de uno de los en ese entonces mas fuertes guerreros del reino de los cielos. En muy poco tiempo Yuda, demostró tener un alto potencial tanto en combate como en liderazgo y estratega, siendo así que el “creador” decidió ascenderlo como el líder nato de su nuevo ejército.
Fue entonces como se separo de su mentor y compañera de entrenamientos por la que empezó a sentir algo extraño, un sentimiento diferente a los que tenía por sus hermanos Ángeles, mas sin embargo el destino le tenía preparadas otras cosas y por el momento no sabría que era “eso” que su persona sentía por ese ángel...
Mientras estuvo en el liderazgo, fue respetado y temido tanto por sus aliados como por sus enemigos, nunca perdían una batalla en la que el estuviera al frente. Un día le fue avisado que unos demonios tenían planeado atacar el reino de lo cielos, sin pensarlo reunió sus tropas y salio a combatir, al llegar a aquel lugar, como se los habían dicho hay se encontraban estaban aquellas bestias sedientas de sangre, Yuda dio la orden de atacar; fue una lucha dura y sangrienta, para su fortuna hubo pocas perdidas en su escuadrón, cuando estaban a punto de retirarse uno de sus compañeros dio el aviso de que mas tropas enemigas vendrían a atacarlos; sin mas tuvieron que quedarse a enfrentarlos, mas no sabían que mientras ellos luchaban en ese lugar otro escuadrón de demonios el doble de fuertes se dirigían al reino de los cielos aprovechando que ellos los mas fuertes no se encontraban…
Así fue como en los cielos hubo una batalla épica muchos perdieron la vida entre ellos el que fue su mentor que no nada mas era eso, si no un buen amigo y compañero… Mientras tanto fuera del reino los ángeles seguían luchando ferozmente contra los demonios, Yuda siempre al frente del batallón se destacaba de entre los demás; por fin el ultimo de sus enemigos estaba siendo eliminado, este mismo antes de dar su ultimo aliento les dijo, que a estas alturas su querido hogar estaría destruido todo había sido una trampa para alejarlos, así expiro el demonio…

Después de estas palabras se dirigieron a su hogar sin más tiempo que perder, cuando se hubieron acercado al cielo vieron con horror que todo estaba completamente destruido a pocos kilómetros del reino; los cadáveres de sus amigos y enemigos yacían sin vida en el campo de batalla, al parecer los ángeles habían ganado, protegieron el reino dando sus vidas con ello…
Mientras tanto Yuda y sus compañeros se dieron a la tarea de buscar sobrevivientes en aquel lugar, pasaron las horas sin encontrar nada ni una señal siquiera de vida, toda esperanza se había perdido…, después de un rato todos habían dejado de buscar, él era el único en aquel campo lleno de sangre y muerte, de pronto no muy lejos sintió la presencia de alguien más; rápidamente fue a ver de quien se trataba era un ángel mal herido cualquiera hubiera pensado que no sobreviviría; al descubrir su rostro que se encontraba cubierto por su cabello vio que era su compañera de entrenamientos aquella joven dulce y calida con la que había convivido por mucho tiempo. La tomo en brazos, llevándola a una cabaña no muy lejos de allí, al llegar se dedico a sanar las heridas del ángel, aquel sentimiento aparecía de nuevo al estar con ella, crecía mas en él se encontraba confundido, se supone que los ángeles no deben de sentir algo así o ¿si?… ¿Qué es esto que siento?. Se preguntaba cada que veía aquel hermoso ángel dormido e inconciente, un deseo por tocarla, por sentir su calor se apoderaba de él con cada segundo, algo un tanto extraño para alguien como él…
En momento tubo que salir de la reconfortante cabaña, dejando a su compañera en aquel lugar, puesto que había sido llamado por Dios, para recibir nuevas ordenes, la principal de ellas era acabar con el mundo de los humanos, Dios deseaba dar por acabada aquellas creaturas que el mismo había hecho… Yuda sorprendido por aquellas palabras se negó a cumplir con ellas, molesto salio de aquel salón, dirigiéndose con sus allegados para plantear con ellos lo que le habían ordenado, para su asombro todos ellos estaban de acuerdo, nadie se atrevería a retar las ordenes de su señor, fue entonces cuando decidió revelarse contra Dios pues el no estaba de acuerdo con los planes que tenia para la humanidad, si estaba consiente de que los humanos no eran de las mejores creaciones que había hecho pero… ¿Acabar con ellos de esa manera?...

Muy pocos lo siguieron por esta causa solo los mas fieles a él y que compartían su ideal, de esos se conformaba su ejercito…Por un tiempo este ideal permaneció oculto, él estaba creando un plan para detener aquella masacre contra la humanidad, poco a poco fue reuniendo mas ángeles, entre ellos una joven que destacaba de entre todos no solo por su fuerza si no por su belleza, poseedora de unos hermosos ojos color carmesí tan profundos y llenos de misterio, esa belleza exquisita que solo él podía apreciar en ese momento pues algo había cambiado desde…esa chica…¿Que había sido de aquella delicada creatura a la que le había salvado la vida? En fin eso no era lo importante por ahora si no como vencería aquella complicación estaba dispuesto a todo y mas ahora a sabiendas que aquellos desalmados ataques fueron un plan mas de Dios.

La decisión había sido tomada, bajo de los cielos con todos sus aliados a un lugar en la tierra mientras todos se preparaban para tal vez la ultima batalla de sus vidas…en ese lugar habito por un tiempo en paz, si es que defenderse de los simultáneos ataques que recibían se le podía llamar paz, por lo menos había dado el primer paso, salir definitivamente de su hogar, estaba consiente que si perdía aquella rebelión no podría volver y mucho menos seria perdonado, sin embargo se sentía bien con lo que estaba haciendo y con su ahora compañera de ojos carmesí todo le parecía bastante sencillo, pero he aquí que el destino puede ser muy cruel e injusto, cierto día una pandilla de demonios llegaron a su nuevo hogar acabando con todo a su paso, lucho con todo pero al parecer no fue suficiente, aquella ultima batalla le había absorbido la mayoría de su poder...logro vencer el pero perdió algo a cambio, la vida de aquella mujer con la que vivió tantas cosas y la que le dio un hija, tan hermosa como su madre con la misma mirada profunda y el color de la sangre en sus ojos…

A partir de aquella batalla en la que casi pierde todo lo que había construido, juro vengarse de todos aquellos que cometieron tal acto y del mismo que lo provoco pues bien sabia que esa masacre era orden del “supremo”…
Después de esto se ha hecho llamar el “rey del nuevo mundo” él junto con todos sus antiguos y nuevos aliados harán del mundo un lugar mejor, o al menos eso es lo que piensa hacer, ¿Acaso habrá algo que lo haga cambiar de parecer?...
Todos aquellos que lo sigan pueden asegurarse de que tendrán protección y poder, los que no ciertamente no le importan, pues ha aumentado su fuerza con el tiempo ahora es mucho mas fuerte si algo puede agradecer es que esas batallas le hayan hecho aprender aquellos sentimientos prohibidos y desconocidos…
El rencor y la venganza obtenida por las batallas libradas, ha de vencer aquel por el que una vez lucho…